Friday, November 21, 2008

Dios En la Mira

Ya ni se como empezar a escribir lo que vine a escribir, las ideas se me atropellan. Haré un enorme esfuerzo por calibrar mi excitación y expresar con palabras, desenredando las emociones encontradas.Empecemos por intentar descifrar el impacto de la primera plana de las noticias recientes: un ser humano demando a juicio a Dios.Soy yo o es que esta sola frase despierta la necesidad de reflexión?. Espero que no sea así ya que las dimensiones de este hecho aislado son de gran implicancia. Afectan a la manera en que concebimos nuestras existencias, rebaten nuestros credos e ideologías, nos hace preguntarnos una vez mas las “preguntas prohibidas”. Quien es Dios?, que relación tenemos con el?, cual es el propósito el objetivo final de nuestras existencias?.Rebatí mucho?, saque demasiadas conclusiones apresuradas?...será así entonces pero el mundo es libre, al menos el mío lo es en cuestión de expresión.Entre el momento en que la noticia me encontró en el sopor de mi anestesiada tarde y el momento en que despertó una reacción súbita pasaron minutos. La noticia causo sobresalto con efecto retardado. Solo que ahora ya no se me sale de la cabeza, por lo irónico y a la vez natural que puede ser en este mundo alzar “un puño al cielo”.Recuerdo que hace unos años atrás una “predicción” que no recuerdo bien de donde surgió causo un revuelo mundial; la idea del FIN DEL MUNDO, el famoso Apocalipsis. Oh si!, ahora lo recuerdo, se trataba de las predicciones de la Virgen de Fátima.No olvido el terror que me causo la primera vez que supe a tierna edad que el mundo “podía acabarse”, y lo que es peor; no seria un final feliz. Estuve 1 mes entero sin querer dormir por el temor a despertar entre llamas, lamentos y torturas inimaginables. Y eso, que mis “pecados” a esa edad no pasarían de mentiras blancas o rebelión innata.Viendo ahora lo que este ser humano pretende hacer, una imagen salto en mi cabeza: la idea del Juicio Final pero en vez de que sea Dios el Juez; esta vez lo seria la humanidad. Al menos eso es lo que dice la Biblia, el Coran y otros “libros sagrados” de las religiones fundamentales: “en el día final cada alma humana ira a juicio y será condenada a arder por la eternidad o elevada al cielo”. Esta será "la hora en que todos los que estén en los sepulcros oirán su voz y los que hayan hecho el bien resucitarán para la vida, y los que hayan hecho el mal, para la condenación" (Jn 5, 28-29).
Y ahora me pregunto, si Dios fuese a juicio (ensayemos la idea) en que “bando” me pondría?, como se dividiría la humanidad?, entre los denunciantes y los intercesores.Interesante, realmente “conmocionante” la idea.Y es muy cierto, es uno de los momentos mas visitados por todo ser humano: cuantos no nos hemos encontrado con una tragedia, con desastres naturales y un sinnúmero de devastadoras experiencias y nos hemos vuelto mirando al cielo (o a donde sea que toque) reclamando con ira, dolor, frustración: porque???. Cuantos no nos hemos visto terriblemente “solos en escena” y hemos buscado en el limite de nuestra fe: donde esta Dios???. Comprendo…comprendo porque yo lo he hecho mas de una vez.Pero realmente podemos acusar a Dios?, o demandarlo?. Será cierto que Dios es el promotor?, el autor inteligente y material del caos en que esta terminando nuestro mundo?. Porque lo haría?...Si hago uso de una analogía diría lo siguiente: si fuésemos maestros de una obra perfecta, porque habríamos de desbaratarla?. Si como padres asistimos con un amor infinito el crecimiento y bienestar de nuestros hijos, seriamos capaces de destruirles la vida después?.Y si decidimos, si llegamos a la conclusión de que no es Dios, es el ser humano. Es el resultado del impacto ecológico, es el efecto del calentamiento global, es la violencia humana, el terrorismo, la injusta diferencia de clases etc. Entonces otra cuestionante inmediatamente sale a flote: y porque Dios lo permite?, porque Dios no nos detiene?.Si como padres corregimos a nuestros hijos, porque Dios no nos corrige?...Será que tiene que ver con la libertad incondicional?, será que algo no comprendemos aun?, será que somos libres de “hacer nuestra vida un chaleco” y chaleco la estamos haciendo?. Será que nada nos va a detener?...o será que si? O será que quien nos detenga es el que vemos en el espejo cada mañana al despertar?, no seremos nosotros mismos?. No será que los únicos responsables tanto de las causas como de tomar medidas para corregir las consecuencias somos nosotros mismos?. Un padre sabio aplica este mismo principio con sus hijos. O quizás el problema sea precisamente ese: estamos corrigiéndonos unos a otros, estamos tomando medidas pertinentes y provisorias. Pero lo estamos haciendo con violencia, con represión, con bombas, con químicos, con guerras.Estamos curando con enfermedad, tratando violencia con más violencia, “ojo por ojo”…Definitivamente estamos demostrando señales de no tener ni la más mínima idea de cómo “arreglar los platos rotos”. Y en nuestra desesperación no lo vemos, en nuestro frenético y sin tino “intento” por solucionar estamos creando más problema.Cual es la solución?, creo que esta claro para mi y para muchos. “Con odio no se soluciona lo que con amor se creó”.

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