Latidos

Soy medico de profesión. Que significa eso?...Siempre me formulo la misma pregunta cada vez que un colega se presenta en público. Incluso yo lo hago formalmente; pero creo que la sola frase se siente fría como el hielo. No, no me conformo con el “sabor a poco” de una introducción tan impersonal:Soy medico si; pero no solo de profesión. No me dedico a curar enfermedades o a tratar pacientes puramente. Es en realidad parte de mi naturaleza, es tendencia.Más de una década atrás, cuando desconocía la diferencia entre mi “carótida” y mi “yugular”, podría afirmar que igualmente desconocía la diferencia entre “profesión” y “vocación”.Al poco tiempo de “estrenarme” como medico tratante fue que todo empezó a aclararse.Y descubrí que ni el cansancio físico, ni la extrema presión de una responsabilidad compleja lograban borrarme la exaltación de un día exitoso.Y pase con los años de definir el éxito como puras metas inmediatas cumplidas a cabalidad, a definir el éxito como un día en que sentí que el esfuerzo me hizo sentir útil como ser humano.Pase de indulgir mi ego con un “diagnostico acertado” o un “tratamiento exitoso”, a alivianar la enorme carga de sufrimiento en un ser humano en desgracia y a sentirme en un nivel de igualdad con el solo hecho de ponerme en su lugar.Deje de lado el consejo mas común en el “mundo medico”, y empecé a tomar la relación con mis pacientes en un sentido mas personal, al descubrir que todos somos lo mismo y que mas imperfectos nos volvemos mientras mas perfectos nos creemos.Soy medico, desde que tome la decisión de dedicar mi vida a luchar por el bienestar social, desde que asumí que no encuentro mayor motivación que el conectarme profundamente con mis semejantes.Soy medico y hace 2 años que no ejercía mi profesión, y fue así que descubrí finalmente que soy medico; pero no solo de profesión.Y que existen mil formas de aliviar el dolor, hacer más llevadera la enfermedad y devolver las ganas de vivir. Y finalmente, que todo el conocimiento, la experiencia y disposición de tecnología no son suficientes cuando se carece de algo indispensable: corazón.